3/27/2007

El Conde de Montecristo

El conde de Montecristo, Alejandro Dumas

Es un libro interesante, en el que en ningún momento falta la intriga y el misterio y en el que predominan los diálogos sobre las descripciones, Si algo malo se puede decir de él, es que el ritmo es muy rápido en la primera parte y, sin embargo, en la segunda se produce un punto muerto.
Es una obra que recomendaría a cualquier persona que disfrute leyendo una buena obra y a aquellos lectores que no se sientan intimidados por un libro de más de mil cuatrocientas páginas.
Beatriz Lemos Pousa, 1º Bach. B

Melmoth el Errabundo

Melmoth el Errabundo, Ch. R. Maturin

Esta no es una de las obras más ligeras de la literatura y no tiene un gran significado oculto, pero, aun así, es una novela muy buena: una historia oscura, siniestra, con pocos momentos en que poder relajarse y, si los hay, son cortados de raíz mediante un giro brusco del argumento. Abundan las descripciones, aunque no hasta el punto de aburrir, porque llegado ese momento siempre sucede algo que hace que el lector retome el interés. Y, aunque presenta cierta dificultad en algunas partes, todo se entiende cuando se continúa leyendo.
En conclusión, una gran obra, muy interesante y muy original.
Santiago Piñeiro Edreira, 1º Bach. B

El monje

El monje, Matthew G. Lewis

Es una obra muy entretenida y fácil de leer. Al principio es un poco lenta y el final se precipita pero el autor alterna muy bien las historias de forma que siempre quedan ganas de seguir leyendo para saber qué le va a pasar al protagonista. El final es, quizá, “demasiado feliz” y le resta verosimilitud, pero es sorprendente y nunca se esperaría lo que le ocurre a Ambrosio.
¡Me encantó!
Óscar Cerqueira Figueroa, 1º Bach. C

Cumbres Borrascosas

Cumbres Borrascosas, Emyli Brontë

Con esta obra he mantenido una relación que va desde la indiferencia, pasando por el aburrimiento, hasta el disfrute de su lectura.
Cuando la empecé me era totalmente indiferente. Después, el lenguaje redundante y las citas bíblicas me la hicieron lenta y aburrida. Pero, finalmente, todo quedó compensado con una acción emocionante e inesperada; y una resolución de los problemas bastante inusual: como el final de la vida de Cathy, que me gustó mucho porque nunca pensé que pasara tan fácilmente del odio al amor y, extrañamente, sin la desaprobación de su tía.
Resumiría su contenido con “los extremos existen”; “amores inamovibles”; u “odios eternos que aumentan con cada nueva herida”.

Uxía Piñeiro Barcia, 1º Bach. B